Resulta que los huérfanos de Santo Barrio, una banda tan de culto dentro de los registros de música nacional, se ven acogidos por sonidos renovados que son interpretados y compuestos por los mismos ex miembros de la banda y músicos amigos. El nombre de esta renovación se llama “Gandjarvas” y está compuesta por el Señor Cristóbal González, César Farah, Rodolfo Vargas (Drakos), Tito Díaz (Sandino Rockers), Rigo Soto (Sonora Major) y DJ Antioch (Elefante Mecánico).
La banda entró a grabar en marzo su primera producción que se titula “De la vieja escuela” de la cual se pueden extraer diversos sonidos y temáticas en sus líricas.
El disco comienza con una particular “Intro” entregada por el espontáneo e irreverente “Merry Melodies”, la cual da paso al segundo track que lleva por nombre el nombre del disco. “De la vieja escuela” comienza con guitarras muy noventeras para que las voces de más adelante protesten con toda la fuerza de una canción muy bien elegida para el inicio de un disco con un coro muy contagioso. Quizás todo lo anterior fue intencional para empezar a degustar lo que se venía en el tercer track titulado “Gandjarvas”, una canción que comienza con DJ Antioch haciendo de las suyas en la tornamesa y con guitarras mucho más bailables junto con el entretenido ritmo y letra del coro. Los juegos de voces en el coro, al final de la canción, hacen que inevitablemente uno mueva su cabeza al ritmo de ésta, rematando con un exquisito funkeo de la guitarra.
En el track cuatro lo que parece ser en un principio una canción de rock se convierte en pocos segundos en una canción ska completamente. “Sálvatelo ya” es definitivamente de esas canciones para saltar, con matices calmos a veces que dan lugar a un clímax mucho más encendido, con trompetas oportunas y gritos de desahogo al ritmo de puro ska. En el track cinco el disco se tiñe de sonidos más rockeros y por ende las voces suenan más agresivas, un ritmo mucho más violento hace que las guitarras tengan un sonido más infernal, es que “El narco” tiene una letra dura y eso hace que toda la canción suene dura.
El track número seis llamado “Dale cariño, dale viagra” en cuanto a sonido podría quizás ser la versión rápida de “De la vieja escuela”, con la diferencia de que en el tema dos se destaca más el ritmo de las voces, en el seis se goza más de los instrumentos, sobretodo del bajo que se deja escuchar casi como protagonista del tema. Con una mezcla muy asertiva y original en el séptimo track aparece “La hora buena”, canción que invita a mover más las caderas que la cabeza o quizás todo el cuerpo. Con base musical casi de cumbia colombiana y con letra esperanzadora , este tema es un pase obligado para que comience la fiesta.
“El cisne negro” es el octavo track y tiene toda la protesta que podría tener a partir del mismo nombre, de su letra y de su melodía. Este tema es otro de aquellos para saltar, con un genial grito final como broche de oro. Las guitarras infernales vuelven con las voces agresivas de “Fire on da barrio”, noveno tema del disco. El coro muy hip hopero se contagia con un solo de guitarra que a media canción huele hasta a rock clásico, muy preciso y excelente matiz para que la canción después reviente con un desgarrador grito final.
Ya nos acercamos al final y nos encontramos con una oración cantada, eso es lo que parece el coro del track diez “Dioses de colores”, guitarras más rock pop en comparación a los tracks anteriores; es una canción que cumple con todos los requisitos para ser single. Con “Rockanrolla” ,que corresponde al track número 11, pasa algo parecido a lo del tema anterior, aunque este tema suena con guitarras más cinematográficas y con ribetes de pop, casi como en una película de Quentin Tarantino. Un tema muy agradable de escuchar donde definitivamente las guitarras hace la mayoría de la labor. Me atrevo a decir que el tema más funk es la 12 “Tony Manero”, el sonido de la guitarra con el contraste del bajo funcionan como una pareja de instrumentos muy sólidos, de hecho casi al final es hasta necesario un solo de cada uno.
Podemos decir que escuchar “De la vieja escuela” fue un real agrado, muy dinámico, entretenido del punto de vista del que se le mire y principalmente muy verdadero. Percibí las ganas de hacerse escuchar en cada uno de los temas, las ganas de jugar con las melodías y de decirlo todo en las líricas… sin censura y por eso agradezco las ganas de transmitir algo real.
Los invito a disfrutar de este disco en vivo este jueves 12 de agosto en La Batuta a las 22 hrs. La entrada es completamente gratis así que no hay excusas para no contagiarse de esta música de verdad, hecha por músicos de verdad, que hoy quieren sonar con más fuerza que nunca y lo mejor de todo es que se les nota.
Por Javiera Saavedra de Quiebravidiros
fotos Jo Olave
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